Physical activity and health-related quality of life in schoolchildren: structural equations analysis

Abstract

The aim of this research was to develop an explanatory model of body mass index (BMI), health-related quality of life, and physical activ-ity, and to analyse the effects of the physical variables on the levels of physical activity, self-esteem and health-related quality of life. A cross-sectional study was conducted on a sample of 631 Spanish schoolchildren (12.5 ± 1.4 years old). They completed questionnaires on self-esteem (Rosemberg test), physical activity (PAQ-C), Mediterranean diet (KIDMED), quality of life (KIDSCREEN-27) and had their BMI and maximum oxygen uptake measured. Structural equations constituted the statistical analyses. A correlation was found between lower BMI and fewer hours of self-reported screen time which was also conducive to higher cardio-respiratory levels and greater engagement in physical activity. More physical activity and better dietary care were related generally with higher health-related quality of life and self-esteem. The model demonstrated ac-ceptable goodness of fit. Findings of the study suggest physical activity and positive dietary behaviours should be promoted in Spanish schools as incremental improvements have the potential to concordantly improve a large range of healthful outcomes including health-related quality of life, self-esteem and BMI.

El objetivo de este estudio es contrastar un modelo explorato-rio del índice de masa corporal (IMC), calidad de vida relacionada con la salud y actividad física, y analizar los efectos de las variables físicas en los niveles de actividad física, autoestima y calidad de vida. Se realizó un estu-dio transversal en una muestra de 631 escolares españoles (12.5 ± 1.4 años). Estos cumplimentaron los cuestionarios de autoestima (test de Ro-semberg), actividad física (PAC-C), dieta mediterránea, (KIDMED), cali-dad de vida (KIDSCREEN-27), además de medir su IMC y consumo má-ximo de oxígeno. Se emplearon ecuaciones estructurales para realizar los análisis estadísticos. Se observó que la correlación entre un bajo IMC y po-cas horas de pantalla se asoció a buenos niveles cardio-respiratorios y a un aumento de los niveles de actividad física. Realizar más actividad física y seguir buenos patrones alimentarios se asoció a un aumento generalizado de la calidad de vida, lo cual se traducía en un aumento de la autoestima. Los resultados indicaron un buen ajuste y fiabilidad del modelo. Como conclusiones, la relación entre un bajo IMC y un menor tiempo de pantalla generó una mayor capacidad aeróbica y un incremento de los niveles de ac-tividad física. Cuando la actividad física aumenta hay un incremento gene-ralizado de la calidad de vida asociada a la salud y la autoestima.