El problema agrario durante la Segunda República
Metadatos
Mostrar el registro completo del ítemAutor
Cobo Romero, FranciscoEditorial
Centro de Estudios Políticos y Constitucionales
Materia
Segunda República Cuestión Agraria Reforma agraria Constitucionalismo Conflictos políticos
Fecha
2022-12-15Referencia bibliográfica
Cobo Romero, Francisco. El problema agrario durante la Segunda República. En: La Segunda República española, 90 años después (1931-2021): balances y perspectivas / coord. por Leandro Álvarez Rey Árbol académico, Vol. 1, 2022, ISBN 978-84-259-1969-5, págs. 419-459
Resumen
En España aconteció, durante los primeros años treinta del siglo xx, un fenómeno de tibia inclinación de importantes sectores de las clases medias rurales y el campesinado familiar hacia el respaldo prestado a los intentos de una buena parte de las derechas católicas y agraristas por lograr el restablecimiento de un orden político autoritario, conservador y tradicionalista, que pusiese fin a la controvertida labor de Reforma Agraria, contuviese la creciente conflictividad rural, restaurase a las viejas oligarquías en sus anteriores posiciones de dominio o amordazase a las izquierdas con el propósito de favorecer el restablecimiento del control patronal sobre los mercados laborales necesario para asegurar una salida ventajosa a la dura crisis agraria padecida. El ataque al ordenamiento político liberal, y el consiguiente desmoronamiento del régimen parlamentario-democrático de la Segunda República, estuvo protagonizado por un golpe militar asestado contra el Estado, animado y respaldado por la mayor parte de unas derechas insurreccionalistas y conspirativas que, casi desde el primer momento, apostaron por su aniquilamiento. En el magma de sentimientos profundamente contrarios a la pervivencia de la democracia albergados por la coalición reaccionaria que se fue gestando desde, al menos, el año 1933 en adelante, el temor de las clases propietarias rurales ante el avance de medidas profundamente transformadoras, como la Reforma Agraria, que ponían en peligro la subsistencia misma del orden patronal tradicional, debe considerarse como un elemento primigenio
y sustancial, dotado de una elevada capacidad para movilizar a sus integrantes
en torno a un vasto movimiento reaccionario y antiliberal.