Análisis y repercusiones de la nutrición en la primera semana de vida sobre el desarrollo neurológico del recién nacido prematuro de muy bajo peso y otras comorbilidades
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Jiménez Montilla, SaraEditorial
Universidad de Granada
Director
Uberos Fernández, JoséDepartamento
Universidad de Granada. Programa de Doctorado en Medicina Clínica y Salud PúblicaMateria
Nutrición Recién nacido Neurodesarrollo Displasia broncopulmonar Ácidos grasos omega-3 Ácidos grasos omega-6
Fecha
2022Fecha lectura
2022-05-16Referencia bibliográfica
Jiménez Montilla, Sara. Análisis y repercusiones de la nutrición en la primera semana de vida sobre el desarrollo neurológico del recién nacido prematuro de muy bajo peso y otras comorbilidades. Granada: Universidad de Granada, 2022. [http://hdl.handle.net/10481/74965]
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Tesis Univ. Granada.Resumen
Introducción y justificación: A pesar de los grandes avances en Neonatología y el
aumento significativo de la supervivencia de recién nacidos pretérmino de muy bajo peso
en las últimas décadas, la prematuridad sigue siendo la primera causa de morbimortalidad
neonatal. Con el parto prematuro, los aportes de energéticos y de nutrientes se ven
interrumpidos de forma brusca, constituyendo una urgencia nutricional que debe
restaurarse lo antes posible. Además, tenemos que tener en cuenta que una nutrición
inadecuada durante periodos críticos del desarrollo, como son la gestación y los primeros
días de vida, especialmente en los recién nacidos de muy bajo peso al nacimiento
(RNMBP), puede afectar al desarrollo pulmonar y neurológico, y favorecer así las
comorbilidades asociadas a la prematuridad a corto, medio y largo plazo. Por tanto, los
aportes energéticos y de macronutrientes administrados en la primera semana de vida
juegan un papel crucial en el crecimiento y desarrollo postnatal de los recién nacidos de
muy bajo peso. Para conseguir una nutrición adecuada y cubrir las necesidades
energéticas y de macronutrientes en RNMBP recomendadas, en muchas ocasiones
tenemos que recurrir a la nutrición parenteral, que permite un aporte calórico adecuado
desde las primeras horas de vida. La NP juega por tanto un papel fundamental en la
nutrición de estos prematuros, siendo los lípidos son una de las principales fuentes de
energía debido a su alta densidad energética. Aunque tenemos que ser conscientes que,
en muchas ocasiones, debido a complicaciones propias de la prematuridad o a
determinadas circunstancias, aun empleando la NP, no es posible alcanzar los
requerimientos mínimos estipulados. En nuestra unidad neonatal se llevó a cabo un
cambio a tener en cuenta en el protocolo nutricional con respecto a la emulsión lipídica
empleada en la nutrición parenteral administrada a los RNMBP prematuros. Se sustituyó
la emulsión lipídica utilizada previamente, basada en aceite de soja (Intralipid) por una
basada en aceite de pescado y mayor proporción de ω-6: ω-3 y vitamina E (SMOFlipid).
Objetivos: Con esta premisa, realizamos 3 estudios donde queremos evaluar si existe
relación, influencia y repercusiones entre los aportes nutricionales recibidos en los 7
primeros días de vida, con las comorbilidades habitualmente relacionadas con la
prematuridad, principalmente la DBP y trastornos del neurodesarrollo. Además,
comparamos ambas emulsiones lipídicas utilizadas, para determinar también la
prevalencia de posibles comorbilidades asociadas y las repercusiones del aporte
nutricional de ácidos grasos poliinsaturados omega-3.
Metodología: Llevamos a cabo 2 grandes estudios observacionales de cohortes donde
recogemos el aporte de macronutrientes y energético, administrados durante la primera
semana de vida tanto por vía enteral como parenteral, a casi 400 RNMBP prematuros
ingresados en la unidad de cuidados intensivos neonatales del Hospital Universitario
Clínico San Cecilio (Granada) en un periodo de tiempo comprendido entre 2008 y 2018.
Con ello, queremos determinar si un aporte energético deficitario se asocia, por un lado,
con el riesgo de desarrollar displasia broncopulmonar y, por otro, pudiera afectar al
neurodesarrollo y favorecer otras comorbilidades. Con respecto al desarrollo neurológico también evaluamos la posibilidad que
pudiera verse afectado por la condición de restricción del crecimiento intrauterino
(IUGR) previa y/o por un aporte nutricional energético inadecuado durante el periodo
neonatal precoz. Realizamos un seguimiento de la cohorte en consultas externas de
neurodesarrollo de nuestro hospital donde evaluamos el desarrollo motor, cognitivo,
sensorial y conductual a los 14, 25, 33 y 50 meses de vida.
Planteamos un estudio observacional retrospectivo con una cohorte de 170 RNMBP
para determinar la morbilidad neonatal en estos prematuros durante los dos periodos:
cuando la nutrición parenteral estaba basada exclusivamente en Intralipid, y cuando solo
se administró SMOFlipid.
Resultados y conclusiones: En base a nuestros resultados podemos afirmar, no solo que
la nutrición precoz y el aumento de los aportes energéticos en la primera semana de vida
están asociados con un menor riesgo de desarrollar DBP, sino que además una restricción
energética postnatal se asocia de forma significativa con alteraciones neurológicas y un
peor desarrollo neurológico. Con respecto a los lípidos, tenemos que tener en cuenta que
su inclusión precoz en la solución de NP puede ser esencial para asegurar que se recibe
un aporte energético suficiente, y, por tanto, reducir el riesgo de DBP, además parece que
la administración de SMOFlipid puede mejorar discretamente la prevalencia de colestasis
o DPB.