Academic Service and Promotion in Australian Universities

Abstract

In a context of the casualisation of the workforce, increased technology-mediated teaching, and higher research expectations, the authors explored the changing nature of Australian academic service – that is, service to the university, the community and the profession/discipline. As one element of promotion in universities, academic Service in the higher education sector is ill defined, and poorly described in comparison to the Research and Teaching elements of an academic’s role. While the authors saw some evidence of Australian universities paying greater attention to the ‘Service’ Domain, there remains inconsistent and ambiguous documentation and guidance provided by universities about this Domain. From their review of promotion documentation of 24 percent of Australian universities, the authors identified four key elements which universities could provide to assist academics to develop their promotion applications with respect to their service achievements: descriptions of expected practices in each area of service, and at each academic level; details of evidence that can be used to demonstrate the practices and their impact; case studies which demonstrate the practices, evidence and impact expected at each academic level in the Service Domain; and a definition of Service. As academic work is dramatically altered in consequence of a global epidemic, it is critical to identify specific practical steps institutions can take to assist staff to advance in their careers.

En un contexto de informalización de la fuerza laboral, aumento de la enseñanza mediada por la tecnología y mayores expectativas de investigación, los autores exploraron la naturaleza cambiante del servicio académico australiano, es decir, el servicio a la universidad, la comunidad y la profesión o disciplina. Dado que es un elemento de promoción en las universidades, el servicio académico en el sector de la educación superior está mal definido y pobremente descrito en comparación con los aspectos de investigación y docencia en el quehacer de un académico. Si bien los autores observaron evidencia de que las universidades australianas prestan mayor atención al dominio del "servicio", las universidades siguen otorgando protocolos y orientaciones poco consistentes y ambiguas sobre este dominio. Basándose en su revisión de los documentos de respaldo de promoción del 24 por ciento de las universidades australianas, los autores identificaron cuatro elementos clave que las universidades podrían proporcionar para ayudar a los académicos a desarrollar sus postulaciones de promoción con respecto a sus logros de servicio: descripciones de las prácticas esperadas en cada área de servicio, y para cada nivel académico; detalles de evidencia que puedan usarse para demostrar las prácticas y su impacto; estudios de caso que demuestren las prácticas, la evidencia y el impacto esperado en cada nivel académico en el dominio del servicio; y una definición de servicio. Como el trabajo académico se ha visto alterado dramáticamente como consecuencia de una epidemia mundial, es fundamental identificar los pasos prácticos específicos que las instituciones pueden tomar para ayudar al personal a avanzar en sus carreras.