Métodos de análisis y técnicas de ensayo aplicados al conocimiento del patrimonio histórico. El compromiso del restaurador

Abstract

Hasta hace poco tiempo, los diferentes estudios o datos que podian realizar, o de los que disponía un restaurador sobre la obra de arte, han ido enfocados a especulativas observaciones, puramente contemplativas, tomando como referencia aspectos y criterios estilísticos, formales, artísticos, históricos, estéticos...; en algunos casos cotejados y apoyados con tratados técnicos coetáneos o anteriores a la obra o con la existencia de contratos de su realización. Estos aspectos están enfocados desde un punto de vista eminentemente empírico - por asociacionismo, deducción, intuición, inducción, experiencia, principio de casualidad,...- y no pueden ser estudios o datos que puedan justificarse como fuentes que acrediten de una manera feaciente todos y cada uno de los distintos aspectos de una obra, sobre todo en cuanto a la naturaleza de sus materiales y su estado de conservación o de degradación, causas y consecuencias. Con la aportación de la ciencia, la instrumentación científica y los métodos aplicados a la investigación de la obra de arte, todos estos estudios se ven favorecidos debido a la garantía y fiabilidad de los resultados que, referentes a los aspectos o elementos físicos y químicos de una obra se pueden obtener, conformando una aproximación bastante ajustada acerca de la naturaleza, autoría, cronología, caracterización, tecnología de creación.... que proporcionan una apoyo primordial para el restaurador y el conocimiento de la obra a intervenir. Y que justificarán, respaldarán y apoyarán los criterios y métodos de intervención; partiendo siempre de la base que es el restaurador el profesional más adecuado para decidir los distintos análisis y estudios a realizar, el encargado de extraer, si es necesario, las muestras que se precisen y, en muchos casos, el que interpreta los resultados y los aplica de manera individualizada.