Ideología, polarización afectiva y análisis del discurso
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Universidad Autónoma de Madrid
Materia
Polarización afectiva Polarización política Desacuerdos cruzados Detección temprana Intervención Affective polarization Political polarization Crossed disagreement Early detection Intervention
Fecha
2022-12-19Referencia bibliográfica
Villanueva Fernández, N. V. F., & Almagro Holgado, M. . (2022). Ideología, polarización afectiva y análisis del discurso. Bajo Palabra, (31), 173–204. [https://doi.org/10.15366/bp2022.31.008]
Resumen
El propósito de este trabajo es explorar
una tensión y un deseo. La tensión es la que
encontramos entre nuestra capacidad para
cambiar de opinión, componente crucial casi
de cualquier interpretación del progreso, y la
tendencia que parecemos exhibir a atrincherarnos
en las creencias que están en el centro
de la identidad política con la que nos
identificamos en un contexto determinado.
Nos gustaría ser capaces de detectar y jubilar
nuestros prejuicios, de avanzar hacia posiciones
más inclusivas y que nos hicieran mejores
ciudadanos. Y, sin embargo, nos vemos arrastrados,
en ocasiones contra nuestro mejor
juicio, hacia posiciones que heredamos de las
personas con las que compartimos las cosas
que nos importan. A lo largo de este trabajo
nos preguntaremos cómo es posible intervenir
sobre esta tensión para retener aspectos
necesarios de ambas tendencias. En concreto,
pensaremos cómo es posible intervenir en
este aparente problema cumpliendo un deseo:
queremos combatir el mal discurso con
más discurso. Las estrategias de intervención
destinadas a contrarrestar los efectos negativos
de la polarización que desarrollaremos
tendrán como objetivo mejorar la calidad de
la deliberación democrática. El diálogo con
aquellas personas con quienes estamos en
desacuerdo nos parece un ideal democrático
irrenunciable. No hay, en este sentido, progreso
sin desacuerdo. The purpose of this paper is to explore a
tension and a desire. The tension is the one
we find between our ability to change our
mind, a crucial component of almost any
conception of progress, and the tendency we
apparently show to cling to the core beliefs
of the political identity we identify with in
a particular context. In order to adopt more
inclusive positions and become better citizens,
we would like to be able to detect and
replace our prejudices. And yet, we are dragged,
sometimes against our better judgment,
toward positions that we inherited from those
with whom we share the things we care
about. Throughout this paper we wonder
how it is possible to intervene on this tension
in order to retain necessary aspects for both
tendencies. In particular, we explore how it
is possible to intervene on this apparent problem
by fulfilling a desire: we want to combat
bad discourse with more discourse. The
intervention strategies devised to counteract
the negative effects of the rise of polarization
that we develop are aimed at improving the
quality of democratic deliberation. Deliberating
with those whom we disagree with
seems to us to be an essential democratic
ideal. In this sense, there is no progress without
disagreement.