Consideraciones estructurales para la intervención en salud mental: pobreza, desigualdad y cohesión social
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URI: http://hdl.handle.net/10481/52018Metadatos
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Miranda-Ruche, XavierEditorial
Editorial Universidad de Granada
Materia
Salud mental Pobreza Desigualdad Privación relativa Cohesión social Mental health Poverty Inequality Relative deprivation Social cohesion
Fecha
2018-06Referencia bibliográfica
Miranda-Ruche, X. (2018). Consideraciones estructurales para la intervención en salud mental: pobreza, desigualdad y cohesión social. Trabajo Social Global – Global Social Work, 8(14), 108-124. doi: 10.30827/tsg-gsw.v8i14.6377. [http://hdl.handle.net/10481/52018]
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Departamento de Trabajo Social y Servicios SocialesResumen
La integración de la perspectiva social en el ámbito de la salud mental continúa siendo dificultosa. El
análisis y la intervención en este campo se siguen caracterizando por un dominio de la biología y
psicología, sustentado en un individualismo metodológico. Las disciplinas sociales que, como la
educación y el trabajo social, intervienen bajo estas lógicas de organización asistencial, quedan
frecuentemente constreñidas en el ejercicio de unas funciones excesivamente superficiales y
burocráticas. Ante la necesidad que las actuaciones en este ámbito no se ciñan al tratamiento de
aquellas personas ya diagnosticadas, sino que persigan también el objetivo de prevenir los
problemas mentales y promover el mantenimiento de la salud, resulta imprescindible que los
profesionales que ejercen la intervención social conozcan e interioricen las numerosas evidencias
que señalan la influencia de las circunstancias estructurales en la prevalencia de los trastornos
mentales. Este artículo trata precisamente de señalar parte de esas evidencias. Mediante ellas se
pone de relieve la incidencia de la pobreza y la desigualdad como generadoras de riesgo en salud
mental. En cambio, se apunta hacia el objetivo de la cohesión social como elemento de protección. The integration of the social perspective within the field of mental health continues to face difficulties.
The analysis and intervention in this field are still characterized by a mastery of biology and
psychology, based on a methodological individualism. The social disciplines, like education and social
work, intervening under these logics of care organization, are frequently constrained in the exercise of
excessively superficial and bureaucratic functions. Faced with the need for actions not being limited to
the treatment of those already diagnosed, but also pursuing the goal of preventing mental problems
thus promoting health maintenance, it is essential the professionals practising social intervention
would know and internalise the numerous evidences suggesting the influence of structural
circumstances on the prevalence of mental disorders. This article presents these evidences in a
precise manner. It highlights the incidence of poverty and inequality as generators of risk in mental
health. On the contrary, it emphasizes the important role of social cohesion as an element of
protection.